Asunto: La primera noche
Fecha: Fri, 24 Sep 2004 00:03:41 -0300


La primera noche
La primera noche entre dos amantes es la que define la intensidad, el lenguaje de una relación, su perdurabilidad en la memoria corporal, su arraigo en nuestra ciudad de los recuerdos. La sumisión tácita a nuestros instintos, la exploración del cuerpo del otro cual si fuera una región abierta, sin fronteras para nuestro deseo; las caricias intuitivas que iluminan exactamente aquél centímetro de piel que anhela ser tocado. Las palabras que se dicen en el instante preciso, ni un segundo antes ni uno después. Los cuerpos que se mueven, ya no impelidos por sus propias fuerzas, sino atendiendo a una energía que no es la suya, y que con maestría arcana crea perfectas coreografías para la unión de los amantes.
Si la primera noche entre dos amantes no los lleva al asombro, al delirio, a la incredulidad ante el encuentro profetizado, ante una perfecta comunión y un exacto acoplamiento, esa noche será olvidada, perdida. No será más que una anécdota, una historia sin matices, inconsistente, fútil.
La primera noche con aquélla amante fue perfecta, intuitiva. Quizás porque nos conocimos en anteriores vidas y nuestras esencias se reconocían la una en la otra, lo que nos permitió atravesar mutuamente nuestros espejos: élla, el mío que le devolvía su imagen fusionada con la mía; yo el suyo, que me mostraba el infinito en los contornos de su rostro.